Six Laboratorio De Diseño

Ni siquiera tuvo la decencia de enviar una cotización. Ocasionando pérdida de tiempo y oportunidad de trabajo a otras personas.

Bien en cuanto la estimación del presupuesto, de hecho creo que fue la mejor propuesta presentada, pero hubo un problema considerable de comunicación, misma que fue el factor para no poderse concretar la realización del proyecto.

NO recomiendo para nada que alguien contrate esta empresa. El dueño, quien fue la persona que nos atendió, realizó pésimos trabajos e incompletos y no volvió a contestar llamadas para responder por los mismos. Además demostró total falta de conocimiento en los temas.

A continuación detallo todos los problemas que tuvimos con él.

Contratamos los servicios de esta empresa a través de la persona que nos contactó cuyo nombre es Hernán Navarrete Guerra.

Hicimos un contrato con él y nos dejó hasta copia de su INE.

Los trabajos para realizar como parte del contrato fueron:

1. Instalación de cisterna rotoplas, con enterrado, configuración eléctrica e hidráulica

2. Empastado de muro interior

3. Colocación de placas de acero en la reja del portón exterior con pintado.

Con fecha fin de 10 de enero de 2019

De acuerdo con el plan de proyecto que nos presentó, la cisterna quedaría debajo del suelo y con la losa colocada para el 24 de diciembre a más tardar. Sin embargo comenzó a tener muchos retrasos diciéndonos todos los días que sí cumpliria en fecha, hasta que la fecha llegó y nos dejó con el hueco en toda la cochera, sólo 5 minutos antes de irse nos indicó que dejarían por 2 semanas el espacio perforado mientras se terminaban las fiestas decembrinas y no taparian ni con tarimas el hueco. Después de mucho insistirle y gracias a la consciencia del maestro de obra que trabaja para el, armaron un barandal improvisado para evitar el riesgo de caídas.

Cabe mencionar que para esa fecha la mitad del trabajo (3 puntos mencionados anteriormente) ya habían sido pagados), por lo que se conversó con él para no seguir dando pagos sin estar cumpliendo con los trabajos (esto llevaría a terminar de pagar la obra antes de siquiera concluir con la cisterna quedando como pendientes dos trabajos más)

Durante todo ese tiempo demostró no tener conocimiento ni experiencia en la excavación, tuvo que cambiar varias veces de herramientas y dejó de presentarse a supervisar personalmente la obra durante semana y media, dando pretextos de todo tipo e inclusive temas familiares de índole extraordinaria. Además de esto, en varias ocasiones nos pidió dinero prestado para darle al maestro de obra, no solo para cubrir su pago sino también para la compra de material necesario para seguir con avances en la obra, por esto se tuvo que acceder acordando con el que se tomarían en cuenta estas aportaciones al remanente de pago.

Para el material relacionado a la instalación eléctrica e hidráulica de la cisterna tuvimos nuevamente que cubrir los gastos debido a la falta de liquidez de Hernan Navarrete, a pesar de que se habían dado adelantos, pagos de material necesario y parcialidades a los maestros de obra por su trabajo

El siguiente trabajo a ejecutar fue la colocación de placas en el portón (3), durante una semana comentó que las placas se habían cortado según las medidas que tomó previamente, que llegarían cortadas, que venían en camino, transcurriendo varios días sin que llegaran al domicilio.

Cuando finalmente llegaron las placas estas eran más delgadas al calibre comentado previamente por Hernán y llegaron las hojas completas, sin cortar, otra de las inconsistencias en los comentarios de Hernán tratando de justificar las demoras de los trabajos a realizar.

Las placas eran tan delgadas que a pesar de que había comentado iban a soldarse a las barras del portón, al momento de soldar la primera parte se quemaron y perforaron, y por recomendación del maestro de obra fueron colocadas con unas pijas. Esto evidenció que el escatimar en la compra de un material, se adquirió uno de menor calidad y resistencia, por la incompatibilidad con la soldadura, adicional a que la alternativa para solucionar temas relacionados con el trabajo eran planteados por el maestro de obra.

Por otro lado, al momento de conseguir la pintura del portón, a pesar de que el nosotros como clientes, le conseguimo el tono y color (con base en el color que ya tenía la herrería - anodizado) directamente con un proveedor de pinturas (COMEX) Hernan acudió con otro proveedor diferente y compró un color completamente distinto a pesar de que dijo que quedaría igual.

Aún peor es que utilizó una pintura no apropiada para metal de tal manera que en cuanto se secó se empezó a despegar como si fuera plastificado y debido a que la lámina no quedó soldado, se está filtrando agua de lluvia entre los huecos de la lámina y el portón provocando que esté se oxide, aunado al hecho de que no termino los trabajo prometidos y dejo parte del portón sin pintura.

Para el empastado, dado que el muro ya contaba con un dibujo previo a pesar de la recomendación nuestra (clientes) y de su maestro de obra, Hernán comento que el aplanado no era necesario porque el relieve se encontraba desgastado, se hizo de esta forma todo el muro y dado que quedaban cortados y mal las líneas. Finalmente se tuvo que empastar y volver a trabajar, esto se hizo varias veces hasta que identificamos (el cliente) el tipo de cepillo y el maestro de obra lo adecuo para lograr el acabado.

Sinceramente en la totalidad de las ocasiones los maestros de obra fueron lo que se preocuparon por la falta de materiales y la calidad del trabajo, platicando directamente con nosotros (el cliente) para evitar tiempos muertos.

La falta de profesionalismo, conocimiento, experiencia y formalidad de Hernán Navarrete Guerra, hacen que su trabajo sea cuestionable y cero recomendable.

Nota: Tenemos evidencia en diferentes formatos: documentos, imágenes, fotos, etc.

Excelente.

No hicieron contacto, por lo que no existe otra valoración.

Muy buen seguimiento y atención.